Puerto Rico promociona la gastronomía de la isla

Con la pregunta “¿por qué Puerto Rico es también un paraíso para los foodies?”, es que Discover Puerto Rico busca impulsar la oferta gastronómica de la isla como un atractivo más por los que hay que ir a conocerla.

Aquí, 4 respuestas por las que Puerto Rico es un verdadero paraíso para los amantes de la buena vida ¡y la comida!

1. Tradiciones culinarias
Un viaje a la isla no está completo si no se saborean platillos básicos como el mofongo, hecho de plátanos verdes fritos; los tostones, ruedas dobles de plátano fritas; los pasteles, se parecen a los tamales y se preparan tradicionalmente con masa de plátano verde rellena con carne de cerdo guisado; y el lechón asado, cerdo asado lentamente con carne jugosa y piel crujiente, que ha sido recientemente declarado legado culinario puertorriqueño.

2. Cocteles y mixología de vanguardia
La escena de la coctelería de la isla ha evolucionado con el mismo cuidado que la escena culinaria. Puerto Rico es la cuna de la piña colada, y el viajero descubrirá que el enfoque innovador de las bebidas refrescantes continúa hasta nuestros días, ya sea en uno de los mejores bares del mundo en el Viejo San Juan, en una travesía por una cervecería, en una cata de rones locales o simplemente con un coctel junto a una piscina.

3. Chefs que enamorarán tu paladar
La creatividad y variedad de la cocina puertorriqueña son presentadas por expertos que destacan la gastronomía de la isla de diferentes maneras. Con un grupo emergente de chefs locales que elevan los productos y sabores de la isla con técnicas especializadas, merece la pena visitar la escena culinaria de Puerto Rico. Con sabores y técnicas sorprenderán a tu paladar, aquí algunos de los mejores chefs de la isla como: José Santaella o Juan José Cuevas, por mencionar algunos.

4. Café, por favor
Despertar en Puerto Rico incluye tomar una buena taza de café, colao, ya sea puya, cortado, término o clarito, y, si se visita a una familia local alrededor de las 2:00 o 3:00 p.m., también ellos ofrecerán a los viajeros una taza de café. El grano es una gran parte de la cultura puertorriqueña, se ha cultivado en la zona montañosa de la isla desde el siglo XVIII y en el siglo XIX, fue una de las industrias más importantes.

En los últimos años, muchas haciendas cafetaleras se han abierto al público, ofreciendo recorridos por las fincas y llevando a los visitantes a través del proceso de producción desde la semilla hasta la taza. Muchos también tienen muy buenos restaurantes y cafeterías; algunos incluso ofrecen cabañas para pasar la noche.

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