“La sostenibilidad también es asegurar un futuro saludable para tu empresa”

Por: Jessica Servín Castillo

Jessica Matthias, directora de Sustentabilidad Global de Sabre, es responsable de crear e implementar la estrategia de sostenibilidad de la compañía. Esto abarca desde establecer objetivos para reducir las emisiones, hasta la formación de asociaciones y alianzas, y la puesta en marcha de iniciativas para el desarrollo de productos de sostenibilidad. Platicamos con ella sobre ello:

En estos primeros meses, ¿qué destacarías de tu trabajo en Sabre, en qué objetivos trabajas?
Desde que comencé he estado trabajando en la creación de una estrategia de sustentabilidad para Sabre, de modo que podamos establecer objetivos significativos para ayudar a la compañía y a la industria de los viajes, a operar de manera más sostenible. Desde entonces nos hemos unido a Travalyst, así como poner a disposición información de sostenibilidad en dos de nuestras herramientas de punto de venta.

Cuéntanos sobre esta unión entre Sabre y Travalyst
Travalyst es una coalición precompetitiva de algunas de las marcas más importantes de la industria de viajes y tecnología. Estamos trabajando junto a otras 11 marcas importantes, con un valor de mercado combinado de alrededor de 3 billones de dólares, y nuestro objetivo es integrar información de sostenibilidad consistente, clara y creíble en nuestras herramientas de reserva para ayudar a las personas a tomar mejores decisiones de viaje. Unir fuerzas con Travalyst nos ayuda a impulsar decisiones de viaje más sostenibles; es un paso importante para Sabre y un objetivo clave en nuestra estrategia de sostenibilidad.

Háblanos de lo que hace Sabre y desde cuándo y qué ha cambiado como empresa para ser más sustentable
Por ejemplo, Sabre le da a cada empleado cuatro días libres pagados al año para dedicarlos al voluntariado en una causa de su elección. Recientemente, nuestra sede regional en Uruguay utilizó nuestro programa de voluntariado para apoyar a la comunidad local; 317 miembros del equipo ofrecieron 2,536 horas de voluntariado para remodelar una escuela local durante dos días de trabajo en equipo y colaboración. Las mejoras y obras beneficiaron a aproximadamente 1,000 niños que asisten a la escuela.

En Sabre, también tenemos varios programas para ahorrar energía, reciclar, reutilizar y reducir nuestro impacto ambiental. También, reciclamos materiales como cartuchos de tóner de impresoras y basura, y alentamos a los empleados a considerar el impacto ambiental de sus acciones en el trabajo. Nuestra sede central de Southlake es un buen ejemplo de estas iniciativas; utilizamos productos de limpieza ecológicos, tenemos iluminación y grifos con sensor de movimiento y fomentamos activamente el reciclaje.

Para ser amigables con el medio ambiente, también es importante crear conciencia, ¿cómo se logra esto en Sabre?
Una de las primeras cosas que hicimos fue lanzar una red global de comunidades de práctica o “Community of Practice” de sostenibilidad para los miembros de nuestro equipo. Esta red está formada por varios grupos locales en algunas de las oficinas más grandes de Sabre, y está formada por voluntarios apasionados por la sostenibilidad y que quieren contribuir a nuestros objetivos globales a nivel local. Nuestras comunidades de práctica nos ayudan a difundir la agenda de sostenibilidad de Sabre y a impulsar y difundir iniciativas importantes.

A nivel general, en la industria del turismo, ¿en qué crees que se deba trabajar prioritariamente para transformar el sector en sustentable?
Muchas empresas del sector de los viajes se están comprometiendo con los “Science Based Targets” u objetivos basados en la ciencia, que son declaraciones públicas de cómo alcanzarán las emisiones netas cero a largo plazo (normalmente para 2040 o 2050). Sin embargo, a corto plazo, es importante poner a disposición de las personas información sobre sostenibilidad cuando reservan viajes. Por ejemplo, utilizar el mismo método para calcular las estimaciones de emisiones de vuelos en todas las fuentes de reserva. También, es importante que ayudemos a contextualizar esos datos para los consumidores, encontrando formas de explicarles si 0.5 toneladas de emisiones de CO₂ por pasajero en un vuelo de Ciudad de México a Cancún es bueno o malo, por ejemplo.

La tecnología también se puede utilizar para ayudar a las aerolíneas y los hoteles a realizar mejoras operativas que pueden conducir a la reducción de CO₂. Por ejemplo, la tecnología puede ayudar a reducir las emisiones durante los tiempos de rodaje de los aviones, en la programación de franjas horarias y en la gestión de la capacidad y la carga a bordo.

Para saber más sobre Sabre visita: sabre.com/insights/category/around-the-industry/sustainability/